jueves, 17 de mayo de 2007

Cuando no se quiere respetar

La diferencia entre un país desarrollado y nosotros, es que en esos países, hay un respeto hacia el orden establecido, se respeta a los conciudadanos.
En el Perú, lamentablemente, el respeto no es la máxima virtud, y por ello nos miran como un país atrasado.
Podemos sentirnos orgullosos de nuestra gastronomia, de nuestros lugares turísticos; pero no podemos ocultar nuestras calles sucias por la inconciencia cívica, porque no se respeta las leyes de tránsito, porque hay buses camiones que llevan pasajeros con la muerte al acecho, y obviamente por la inoperancia, corrupción y blandez de las autoridades por imponer el orden. Porque si quieres que te escuchen tomas las calles, las carreteras, como los cocaleros, como ese imberbe que ha sido elegido Presidente Regional de Ancash y que no se ha dado cuenta que el debe manejar sus requerimientos de otra manera y no incentivando una marcha violenta.
El cambio tiene que venir con mano dura, no queda otra alternativa.
Hay temas quemantes como el de Santa Anita, al que no se puede ser blando, porque sino van a aparecer más Santa Anitas.
A la cárcel con aquellos negociantes de terrenos invadidos, que se hacen millonarios a vista y paciencia de las autoridades y con el apoyo de malos congresistas.
La oposición de los invasores de Santa Anita, de la manera más ruin; utilizando niños, y con el apoyo de los reservistas del "loco" Humala, tiene que ser bien estudiada y ser tratado con inteligencia, tipo "Chavin de Huantar"; con dureza, pero evitando que corra la sangre y que aparezcan mártires.
La tiene dificil el gobierno, pero hay que hacerlo, de una vez por todas; firmeza al actuar, que se sienta que hay autoridades.
jmurse
Revisar http://www.inkasol.com

No hay comentarios: